Los DESGARROS MUSCULARES son la lesión más frecuente en el deporte, a pesar de esto muchas veces son subestimados por los que lo padecen. El concepto de que son lesiones banales y que en 3 semanas de reposo uno se recupera es muy erróneo. Esto cobra especial importancia en algunos tipos de desgarros que podríamos considerar GRAVES. Los desgarros más complejos para una correcta recuperación son los de los músculos isquiotibiales y los del recto anterior del cuádriceps a nivel proximal (cerca de la cadera) y los desgarros del músculo gemelo a nivel distal. Lo que hace más dificultosa la curación de estas lesiones es que en estas regiones musculares existen fibras tendinosas y los desgarros a este nivel generalmente las involucran, por lo tanto estaríamos en presencia de una LESIÓN MÚSCULO-TENDINOSA y no solamente en un banal desgarro muscular. La recuperación de estos desgarros con afección miotendinosa lleva un promedio de 6 a 8 semanas. Todos los pacientes que sufren estas lesiones deben realizar un protocolo de rehabilitación para que la cicatriz que se forme sea lo más fisiológica posible, de lo contrario el paciente tendrá un alto riesgo de recidiva de la lesión. Otro punto importante es que en la rehabilitación el deportista trabaje los factores que lo predispusieron a lesionarse, ya sea falta de elongación, movilidad, fuerza y cualquier otra alteración biomecánica que tenga. Por último el retorno deportivo siembre debe ser progresivo y escuchando muy bien a los síntomas que son los que van a marcar el tiempo de recuperación. Si quiere ver un ejemplo de protocolo de retorno progresivo al deporte presione este link http://drfrancodellavedova.com.ar/informacion-para-el-paciente